La cirugía ortognática es un procedimiento quirúrgico avanzado diseñado para corregir irregularidades en la estructura de los huesos maxilares y mandibulares. Esta intervención combina aspectos funcionales y estéticos, mejorando tanto la salud bucodental como la apariencia facial de los pacientes. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta especialidad.

¿Qué es la cirugía ortognática?

La cirugía ortognática es una técnica utilizada para corregir problemas severos de alineación de los maxilares que no pueden solucionarse solo con ortodoncia. Es comúnmente recomendada para tratar:

• Maloclusiones graves (como sobremordida, mordida abierta o mordida cruzada).
• Problemas funcionales como dificultades para masticar, hablar o respirar.
• Asimetría facial marcada.
• Apnea del sueño causada por una estructura ósea anormal.

¿Cómo saber si necesito una cirugía ortognática?

Si tienes algún problema funcional o estético relacionado con la estructura de tus maxilares, es importante consultar a un especialista en cirugía maxilofacial. Este profesional evaluará tu caso y trabajará en conjunto con un ortodoncista para determinar si la cirugía es necesaria. Algunos signos que podrían indicar la necesidad de este procedimiento incluyen:

• Dolor mandibular frecuente o problemas de articulación temporomandibular (ATM).
• Dificultades al cerrar los labios sin esfuerzo.
• Desgaste dental excesivo.
• Desproporción visible entre la mandíbula y el resto del rostro.

¿Cuáles son las etapas del tratamiento?

El tratamiento con cirugía ortognática consta de varias etapas, cuidadosamente planificadas para garantizar resultados óptimos:

1. Evaluación inicial: El especialista realizará un examen clínico, radiografías y modelos 3D para analizar tu situación.
2. Preparación ortodóncica: Antes de la cirugía, es común usar ortodoncia para alinear los dientes en su posición adecuada.
3. Cirugía: Generalmente se realiza bajo anestesia general y puede incluir cortes y reposicionamiento de los maxilares.
4. Recuperación y rehabilitación: Después de la cirugía, seguirá un periodo de adaptación que puede incluir dieta blanda y terapia postquirúrgica.

Beneficios de la cirugía ortognática

• Mejora funcional: Permite una mejor masticación, habla y respiración.
• Mayor estética facial: Corrige asimetrías y mejora el equilibrio de las proporciones faciales.
• Salud bucal a largo plazo: Reduce el desgaste dental y previene problemas en las articulaciones mandibulares.

Recuperación y cuidados postquirúrgicos

La recuperación tras una cirugía ortognática requiere paciencia y compromiso. Algunos consejos incluyen:

• Seguir una dieta blanda o líquida durante las primeras semanas.
• Asistir a las citas de seguimiento con el cirujano maxilofacial.
• Realizar ejercicios faciales recomendados para recuperar la movilidad.
• Evitar esfuerzos físicos intensos durante el periodo de recuperación.